Calle Real de San Fernando-Cádiz-, por donde pasearon las mujeres y los hombres citados aquí. Descansen en paz.
MEMORADUM DE ESCRITORES ISLEÑOS Y DE OTROS AUTORES QUE
RESIDIERON EN LA ISLA DE
SAN FERNANDO (CÁDIZ)
BREVE MEMORIA LITERARIA DE LA
ISLA DE SAN FERNANDO
Podría titular esta sección Isleñas e isleños que escribieron verso
y/o prosa llevados por su amor a la lectura y la escritura literaria, pero
he optado por el título que reza en la portada para incluir gentes de la Isla (o venidas de fuera y
establecidas aquí para siempre) que dedicaron muchos ratos de su vida a
escribir sin grandes aspiraciones o, mejor, dicho, sin ambiciones, sino
solamente con el afán de compartir con los demás su amor a la literatura, a
manera de inquietudes desde el poema a la narrativa, pasando por la reseña
gráfica de la ciudad con sus archivos fotográficos y comentarios pertinentes y
biografías de isleños relevantes que hicieron su obra en la Isla. Dejo aparte a
escritores como Manuel Barrios Gutiérrez (1924-2012), que residió casi toda su
vida en Sevilla, en la que trabajó, se casó, tuvo sus hijos y se dedicó al
periodismo, la novela y el ensayo.
Exceptuando a los más antiguos lejanos en la memoria ciudadana, los más actuales fueron gente
conocida y querida por el que esto suscribe y admirada por su afán
desinteresado de escribir sobre diversos asuntos y en presentaciones de libros,
charlas y tertulias mantener vivo el interés cultural de ciudadanos de a pie que los estimaban. Me quedan nombres de algunos de los que no tengo
los datos completos.
Servando Camúñez (1854-1936)
Gaditano. Ejerció de médico en la vecina Isla de San Fernando. Dejó
sus poemas en un voluminoso libro titulado Versos de ocasión, poesía
realista al estilo de los poetas de la segunda mitad del siglo XIX. Fue
director de periódicos locales y bibliotecario de la biblioteca municipal
"Almirante Lobo".
José María Carpio
Castaño (1857-1936)
Isleño, de profesión subteniente de Marina. Escribió obras sobre
temas locales y títulos como Murió en
pañales, La Habana, Los toros de la muerte…
Benito Cellier Butrago
(¿-?)
Del arma de caballería.
Obras: Nacionalismo, Lecturas de campamento, Apuntes de la historia de
Chiclana. La batalla naval de Lepanto.
Pedro Ristori y Morojo
(¿-?)
Estudioso de la sociología
isleña. Obras: Isla de San Fernando, Una muchacha en la Isla, La hora de las cañas.
Alfredo Roca Rittwagen (¿-?)
Escribió: Las
callejuelas, Postales isleñas,Fue colaborador en el diario isleño La Correspondencia.
Manuel Rodríguez Marín
(¿-?)
Isleño. Dedicado a la enseñanza y a la publicidad. Escribía con el seudónimo de
Juan Ortiz del Barco. Obra suya: Cartas marítimas.
Salvador Clavijo y
Clavijo (¿-?)
No tengo más noticias de
este autor. Fue teniente coronel del Cuerpo de Sanidad. Escribió varias obras,
entre las que hemos de mencionar:La ciudad
de San Fernando, de gran utilidad para los ciudadanos.
José
Luis Jiménez Guerra (1874-1931)
Nacido
en San Fernando –Cádiz-. Maquinista de 2ª de la Armada. Independientemente
de su profesión, fue un ciudadano comprometido con la ciudad en cuanto a
su bienestar y progreso. Precursor de la actual Acuicultura
en un concurso de ideas convocado por el Ayuntamiento en
1906.
Colaboró
en varios diarios como La
Correspondencia y el Heraldo de San Fernando, así como
en ABC de Sevilla. También dirigió otros periódicos como La Tarde, 25 de
Marzo y El 93. Obtuvo premios como el de las Justas Literarias
de Cádiz de Cádiz de 1913 y el de las Fallas de Valencia en 1910.
Dejó una obra titulada Pinceladas marítimas.
Concepción Pérez Baturone (1884-1966)
Nacida en San Fernando. Fue funcionaria y concejal del ayuntamiento de
San Fernando. Académica de la
Real Academia de San Romualdo e Hispanoamericana de
Cádiz. Escribió: Una impresión, De cara al cielo, Ante una fecha, La Rosa de Ávila, La ciudad
de la luz, Alerta a la retaguardia...
Gaspar Fernández de León (1887-1964)
Nacido en San Fernando. Fue Corresponsal de Diario de Cádiz
en San Fernando. Autor de la Guía-Anuario de su ciudad, Gaspar Fernández
de León fue una institución en el periodismo local y un hombre de
grato recuerdo para quienes lo conocieron. En el año 1911 es nombrado
corresponsal del “Diario de Cádiz”; en el año 1935 Hijo Predilecto de San
Fernando, y en 1959 recibe la medalla al Mérito en el Trabajo.
Gabriel González Camoyano (1893-1967)
Nació en San Fernando. Escribiente de Marina y profesor en la Politecnia, colegio del
que fue fundador. Colaboró en varios diarios y revistas de poesía. La Real Academia San
Romualdo de San Fernando editó con motivo del centenario de su nacimiento una
muestra de su poesía, tal como una Antología poética. Por su año de
nacimiento, González Camoyano debería estar vinculado a la Generación del 27, pero
su aislamiento lo retuvo en una poesía entre el realismo decimonónico y la musa
popular andaluza.
Diego Berraquero Miril (1904-1972)
Nació en Jerez de la
Frontera y falleció en San Fernando. Fundador de la revista
"Ideales". Trabajó como redactor del "Heraldo de San
Fernando", ejerciendo el periodismo en medios sevillanos. Académico
de la Real Academia
de San Romualdo y concejal del Ayuntamiento de San Fernando. Obra: Cuando
con el amor se juega (1926)
Juan Manuel Oneto Prián (1909-1983)
Nacido en San Fernando. Funcionario civil del Cuerpo General de la
administración militar, con destino en la Capitanía General de
la Zona
Marítima del Estrecho.
Obras editadas: El desierto iluminado y calidoscopio, ambos
libros entre la poesía y la prosa poética.
Quintín Dobarganes Merodio (1913-2004)
Natural de Cabanzón (Santander) y residente en San Fernando desde 1933.
Comandante de Marina, periodista y escritor. Corresponsal de Diario de Cádiz
durante 36 años. Varios libros publicados e infinidad de artículos en prensa y
revistas. Miembro de la
Academia de San Romualdo, Académico de la Historia de Cartagena de
Indias y otras. Publicó en "Arena y Cal" desde 1995, pero se ha de
mencionar especialmente su libro De galopín a académico.
Francisco Montero Galvache (1917-1999)
Nació en San Fernando, de familia de marinos. Licenciado en Filosofía y
Letras por la Facultad
sevillana. Colaborador, desde muy joven, de prensa nacional y extranjera; fue
director de los diarios "Ayer" de Jerez y "Lucha" de
Teruel; premio nacional de Periodismo en 1943, siendo durante muchos años
colaborador de "ABC", de cuya edición sevillana fue delegado en Jerez
hasta su jubilación. Estaba considerado como el creador del pregón de semana
santa. Algunas obras suyas son: Huerto Cerrado, El mar está solo (finalista
del Premio Nadal), también Las manos también lloran (finalista del
Premio Planeta).
Alberto Orte Lledó (1919-2011)
Nació en Melilla. Fue Almirante Director del Real Observatorio, entre los
años 1977 y 1985. Poseyó los títulos de Académico Correspondiente de la Real Academia de
Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, de Número de la de San Romualdo, de San
Fernando, Académico de Honor de la Real Academia Hispano Americana y Medalla de Oro
del Instituto de Academias de Andalucía. Versos de ocasión y Retrospectivas
y otros poemas, fueron sus dos publicaciones de género literario.
José María Blanca Carlier (1919-2002)
Nacido en San Fernando. Abogado. Funcionario técnico del Banco de España.
Perito Mercantil y Graduado Social. Académico de la de San Romualdo de
Ciencias, Letras y Artes y vocal del Museo Naval de la Escuela de Suboficiales.
Tiene publicado un libro: "La
Marina en Cádiz", y numerosísimos trabajos en la Revista de Marina y otras,
además de artículos en prensa y revistas, como, por ejemplo, “Arena y Cal”,
editada en San Fernando bajo la dirección de Alfonso Estudillo Calderón.
Ramón O´Dogherty Sánchez (1919-2011)
Fue médico analista. Académico de honor de la Real Academia de San
Romualdo. Caballero Hospitalario de San Juan Bautista.
Académico de Honor de la Real
Academia de Palma de Mallorca. Colaboró en revistas médicas,
así como también en las revistas literarias de La Isla como Erithia, Arena y
Cal y Pléyade.
Juan José García Sánchez (1919-2003)
Nacido en San Fernando. Escribiente de Marina. Poeta de estilo
clásico que colaboró en publicaciones locales como en el boletín ISLA y en
diversos boletines cofradieros, siempre fiel a su opción de manejo de las
formas clásicas, en especial el romance y el soneto. Escribió Romances
blancos y Romances azules, que han quedado inéditos. Perteneció a la Real Academia San
Romualdo.
María Felisa Sánchez García (1922-2004)
Nacida en San Fernando. Maestra nacional. Publicó poemas en revistas
locales y de la provincia. Obtuvo el Premio de Cuentos Puente Zuazo.
Fue también académica numeraria de la Real Academia de San
Romualdo. Perteneció a la
Tertulia Río Arillo de Letras y Artes y fue también pregonera
de la semana santa isleña. Una muestra de su poesía está recogida en el libro Luces
y sombras.
Inocencio Jiménez Ponce (1922-1993)
Nacido y fallecido en San Fernando (Cádiz) Funcionario en la Inspección de obras del
ayuntamiento de esta ciudad.
Autor de sonetos y romances, además de otros metros.
Fue también pregonero de la
Virgen del Buen Fin, de la cofradía del Prendimiento de
San Fernando.
Poemas suyos han sido subidos a Internet por su sobrina María José Solano
Jiménez, bajo el título de “Mecedora de coplas”.
Luis Berenguer (1923-1979)
Nació en El Ferrol, pero vivió casi toda vida en San Fernando
(Cádiz). Estudió en la Escuela Naval
de Marín, saliendo de ella como alférez de fragata, y posteriormente estudió
Ingeniería de Armas Navales en la escuela correspondiente, y a cuyo cuerpo
perteneció. Tuvo destinos en cuarteles navales como Ferrol, La Algora, Marín, La Carraca y San Fernando, pasando
gran parte de su vida en este último. Escribió seis novelas: El mundo
de Juan Lobón, Marea escorada, Leña verde, Sotavento
La noche de Catalina Virgen y Tamatea.
Su obra El mundo de Juan Lobón, publicada en 1968, ganó el premio
de la Crítica
de ese año, y mereció una lujosa y exitosa serie de Televisión Española, que
contaba la vida del furtivo que da nombre al título.
José Casado Montado (1923-1994)
Nacido en San Fernando. Radiotelegrafista naval. Obra publicada: Látigo,
látigo atrás, Historia de un malnacido, Cartas de un malnacido, Relatos de un
malnacido, El globo de Tabarca y Trigo tronzado.
Manuel Avezuela Calleja (1926-2018)
Nació en San Fernando
(Cádiz) y fallecido en Madrid.
Sacerdote secularizado, estuvo trabajando en Nueva York y siguió viviendo allí
después de su jubilación. En septiembre de 1964 José Luis Tejada le presentó en
Los Hermanos La Salle Real
su libro de poesía Desde la hierba, editado en Mérida (Venezuela) por
Ediciones Abril ese mismo año.
En San Fernando, en 2004 la
Fundación de Cultura del ayuntamiento le publicó Jugándose
la vida.
José González Barba (1926-2002)
Nacido en San Fernando. Funcionario contable de Marina. Fue también el
primer gerente de la
Fundación de Cultura de San Fernando desde 1973 a 1992. Fue
colaborador del semanario Mirador de San Fernando y destacado animador de
la cultura de su ciudad. Fue Premio de Cuentos Puente Zuazo.
Joaquín
Quijano Párraga (1927-2012)
Nacido en
San Fernando. Fotógrafo de Marina. Pertenece a una saga familiar de dedicación
a la fotografía muy famosa en su ciudad natal. El Archivo Quijano es de una
riqueza inestimable. Gracias a él los isleños conocemos cómo fue la Isla un siglo atrás. Gran
parte de ese archivo está en un voluminoso libro: San Fernando. Evocación de
un siglo, editado por Grupo Publicaciones del Sur (1998).
Germán Caos
Roldán (1928-1997)
Nacido en San Fernando. Fue empleado administrativo de la Constructora. Narrador
premiado en varias ocasiones y colaborador de Mirador de San Fernando y San
Fernando Información con artículos de opinión. Fue Premio Cuentos Puente Zuazo
y académico de la Real
Academia San Romualdo. Durante muchos años fue el director de
una publicación mensual titulada ISLA, Boletín de de la Sociedad de Fomento de San
Fernando, editado a expensas de dicha sociedad. donde recogía todo lo
acontecido cultural y artísticamente en la ciudad; además, insertaba trabajos
de colaboradores, entre ellos jóvenes que se iniciaban en la escritura
literaria. Publicaciones del Sur le editó una selección de su obra en Antología
(1995), con narraciones, artículos y poemas.
Enrique Carmona Oyonarte (1929-2009)
Jienense de nacimiento, pero isleño de adopción, colaboró en la prensa
isleña, así como fue autor de poemas y artículos. Obtuvo el premio Puente
Zuazo. Fue miembro de la
Tertulia Río Arillo y colaborasdor de la revista Arena y Cal.
José Cervera Pery (1927-2021)
Historiador y militar español
nacido en San Fernando -Cádiz-, José Cervera
Pery fue General Auditor del Cuerpo Jurídico Militar y especialista en Historia Naval.
Publicó numerosos ensayos y fue un conferenciante habitual en congresos y
foros.
Cervera Pery ha
dirigido revistas especializadas como la Revista
de Historia Naval o Proa a
la Mar, entre otras de este género, además, cuenta en su haber
bibliográfico libros de ficción como
obras de relatos y poesía, tales como Seis
cuentos de la Isla y un pórtico viajero y Mar presencia, entre otros. En
1999 obtuvo los premios «Elcano» de periodismo y «Camilo José Cela» de
narrativa por su novela Oscuro acontecer, en la que relata lo ocurrido en su
ciudad natal durante la guerra civil de 1936 a 1939.
Manuel Pérez-Casaux Martínez (1929-2015)
Nace
en El Puerto de Santa María y fallece en San Fernando, donde
vivió desde 1993. Licenciado en Filología germánica, ejerció como
traductor. En principio, sus obras se inscriben en el género
teatral, en el que destaca con premios importantes. También escribió
narraciones y cortas y poemarios, obteniendo en ambos géneros numerosos
premios significativos. Fue miembro de la Real Academia de San
Romualdo de Ciencias, Letras y Artes, así como miembro fundador de la Tertulia Río Arillo
de Letras y Artes, ambas de San Fernando (Cádiz).
Su
primera pieza teatral "La cena de los camareros" enmarcada en
el llamado "Teatro del Absurdo" fue el inicio de una serie de piezas
de esa tendencia. Mas a partir de "Historia de la divertida ciudad de
Caribdis", estrenada en el Festival de Sitges en 1969, y emitida por
TVE en 1976, Sus obras acaban por seguir una trayectoria más comprometida,
adscrita ya a una estética de corte brechtiano. Entre éstas cabría citar: "La
familia de Carlos IV" (Premio de Sitges, 1973), "La curiosa
invención de la escuela de plañidores" (Premio Ciudad de Alcoy, 1976),
entre otras; últimamente pone en escena"Las Cortes de la Isla de León",
estrenada por el Grupo Odisea Teatro, en el Real Teatro de las Cortes, 1999).
A
su vez fue merecedor de la
Medalla del Día de la Provincia de Cádiz a las personas e instituciones
que por su trayectoria vital han sido merecedoras de ellas al buen criterio de la Corporación Provincial,
en 2013.
Gaditano. Ejerció de médico en la vecina Isla de San Fernando. Dejó sus poemas en un voluminoso libro titulado Versos de ocasión, poesía realista al estilo de los poetas de la segunda mitad del siglo XIX. Fue director de periódicos locales y bibliotecario de la biblioteca municipal "Almirante Lobo".
Isleño, de profesión subteniente de Marina. Escribió obras sobre temas locales y títulos como Murió en
pañales, La Habana, Los toros de la muerte…
Del arma de caballería. Obras: Nacionalismo, Lecturas de campamento, Apuntes de la historia de Chiclana. La batalla naval de Lepanto.
Pedro Ristori y Morojo (¿-?)
Manuel Rodríguez Marín (¿-?)
Dejó una obra titulada Pinceladas marítimas.
Nacida en San Fernando. Fue funcionaria y concejal del ayuntamiento de San Fernando. Académica de la Real Academia de San Romualdo e Hispanoamericana de Cádiz. Escribió: Una impresión, De cara al cielo, Ante una fecha, La Rosa de Ávila, La ciudad de la luz, Alerta a la retaguardia...
Diego Berraquero Miril (1904-1972)
Nacido en San Fernando. Funcionario civil del Cuerpo General de la administración militar, con destino en la Capitanía General de la Zona Marítima del Estrecho.
Quintín Dobarganes Merodio (1913-2004)
Juan José García Sánchez (1919-2003)
Nacido en San Fernando. Escribiente de Marina. Poeta de estilo clásico que colaboró en publicaciones locales como en el boletín ISLA y en diversos boletines cofradieros, siempre fiel a su opción de manejo de las formas clásicas, en especial el romance y el soneto. Escribió Romances blancos y Romances azules, que han quedado inéditos. Perteneció a la Real Academia San Romualdo.
Nacido y fallecido en San Fernando (Cádiz) Funcionario en la Inspección de obras del ayuntamiento de esta ciudad.
Luis Berenguer (1923-1979)
Nació en El Ferrol, pero vivió casi toda vida en San Fernando (Cádiz). Estudió en la Escuela Naval de Marín, saliendo de ella como alférez de fragata, y posteriormente estudió Ingeniería de Armas Navales en la escuela correspondiente, y a cuyo cuerpo perteneció. Tuvo destinos en cuarteles navales como Ferrol, La Algora, Marín, La Carraca y San Fernando, pasando gran parte de su vida en este último. Escribió seis novelas: El mundo de Juan Lobón, Marea escorada, Leña verde, Sotavento La noche de Catalina Virgen y Tamatea.
Nacido en San Fernando. Radiotelegrafista naval. Obra publicada: Látigo, látigo atrás, Historia de un malnacido, Cartas de un malnacido, Relatos de un malnacido, El globo de Tabarca y Trigo tronzado.
Sacerdote secularizado, estuvo trabajando en Nueva York y siguió viviendo allí después de su jubilación. En septiembre de 1964 José Luis Tejada le presentó en Los Hermanos La Salle Real su libro de poesía Desde la hierba, editado en Mérida (Venezuela) por Ediciones Abril ese mismo año.
José González Barba (1926-2002)
Joaquín Quijano Párraga (1927-2012)
Nacido en San Fernando. Fotógrafo de Marina. Pertenece a una saga familiar de dedicación a la fotografía muy famosa en su ciudad natal. El Archivo Quijano es de una riqueza inestimable. Gracias a él los isleños conocemos cómo fue la Isla un siglo atrás. Gran parte de ese archivo está en un voluminoso libro: San Fernando. Evocación de un siglo, editado por Grupo Publicaciones del Sur (1998).
Jienense de nacimiento, pero isleño de adopción, colaboró en la prensa isleña, así como fue autor de poemas y artículos. Obtuvo el premio Puente Zuazo. Fue miembro de la Tertulia Río Arillo y colaborasdor de la revista Arena y Cal.
José Cervera Pery (1927-2021)
Historiador y militar español nacido en San Fernando -Cádiz-, José Cervera Pery fue General Auditor del Cuerpo Jurídico Militar y especialista en Historia Naval.
Publicó numerosos ensayos y fue un conferenciante habitual en congresos y foros.
Cervera Pery ha dirigido revistas especializadas como la Revista de Historia Naval o Proa a la Mar, entre otras de este género, además, cuenta en su haber bibliográfico libros de ficción como obras de relatos y poesía, tales como Seis cuentos de la Isla y un pórtico viajero y Mar presencia, entre otros. En 1999 obtuvo los premios «Elcano» de periodismo y «Camilo José Cela» de narrativa por su novela Oscuro acontecer, en la que relata lo ocurrido en su ciudad natal durante la guerra civil de 1936 a 1939.
Salvador Aleu Zuazo (1929-2010)
Nacido en San Fernando.Flamencólogo y pintor. Fundador de la Tertulia Flamenca
de la Isla.
Escribió libros dedicados a cantaores de la Isla de San Fernando,
tales como Flamencos de La Isla
en el recuerdo y El Chato de La
Isla entre la vida y el cante, una biografía del cantaor
José Llerena.
Fernando Miranda Contreras (1930-2012)
Nacido en San Fernando. Funcionario administrativo de Marina. Reportero
deportivo de Diario de Cádiz en San Fernando. Después fue fundador del
semanario Mirador de San Fernando (1965-1988), en el que vertía emanalmente su
artículo de redactor jefe.
Julián Blasco Moyano (1930-1995)
Aunque nacido en Villanueva del Duque (Córdoba), se estableció desde la
edad del servicio militar en San Fernando, donde fue tipógrafo de Marina.
Narrador con premios nacionales como el finalisra en La Hucha de Oro. Fue Premio de
Cuentos Puente Zuazo. Colaborador de Mirador de San Fernando y en San
Fernando Información.Fundó la revista literaria Erythia (1979-1981) y
una publicación de cuadernos, a modo de separatas, para poesía y
narraciones.
Soledad Lozano Cumbreras (1930-2014)
Nacida en San Fernando. Fue miembro de la Tertulia Arillo
de Letras y Artes en su primera etapa y colaboró en la revista Arena y
Cal, primero en su edición de papel y después en edición digital, con
artículos y poemas. Editó varios libros de poemas, tales como Ofrenda, Mi
refugio, Enamorada del Amor…
Manuel Macías Miguel (1932-1992)
Extremeño y afincado en la
Isla de San Fernando por su profesión de comandante
médico perteneciente al Cuerpo de Sanidad de la Armada. Sus
novelas: El templo bajo el mar (1990) y póstumamente Los dátiles del
Balneario(1993)
María
Amparo Gordillo de Celis (1933-2001)Nacida en San Fernando. Maestra nacional. Su obra fue recogida
póstumamente en Cosas de Amparo (2011). Obtuvo el Premio de Cuentos
Puente Zuazo. Colaboró durante algunos años con artículos sobre cine en el
semanario Mirador de San Fernando.
Lectura en el colegio La Salle, hacia 1964. Semana cultural
Antonio González Muñoz (1936-2000)
Nacido en San Fernando. Fue maestro nacional y desde muy joven tuvo
inquietudes literarias que se concretaron en la iniciativa de la Colección Dos amigos,
fundada con Germán Caos R., sufragada por el ayuntamiento de San Fernando
en 1964. En ella editó su relato El idolo. En Conil de la Frontera fundó la Librería y editorial La Cañaílla, que durante
algunos años regentó hasta su traslado profesional a Cádiz. El que suscribe
estas líneas entró en el mundo de la lectura de la poesía gracias a su generosa
biblioteca, cuando Antonio, de soltero aún, vivía en la isleña cal
Francisco Carrillo Mora (1939-2023)
Nacido en San Fernando. Cartógrafo.
Empresario de Imagen y Comunicación. Ha editado Por los siglos de los siglos,
La vida que e debo y Cuando ría la
primavera, entre otras publicaciones de su profesión. Ha montado varias
obras teatrales de obras clásicas. Ha publicado multitud de artículos en varios
periódicos. Ha sido también pregonero de la Semana Santa de su tierra en 1994.
Fue académico numerario de la Academia de Ciencias, Letras y Artes de su ciudad
natal.
Florencio Collantes Pérez (1940-2014)
Nacido en San Fernando. Fue autor de un curioso y
celebrado Dicccionario cofrade de La Isla, obra de gran éxito en el mundo
cofradiero.
JOSÉ ONETO REVUELTA (1942-2019)
Periodista isleño que ha ejercido su quehacer periodístico en Madrid con una reconocida solvencia. Entre sus obras, todas ellas ellas incardinadas en el
devenir
de la vida nacional a partir de la Transición, hemos de destacar las obras
siguientes: La noche de Tejero
(1981), Los ultimos días de un presidente
(1981)
¿A dónde va Felipe (1983)… Anatomía
de un cambio de régimen (1985), entre otras.
Salvador Aleu Zuazo (1929-2010)
Nacido en San Fernando.Flamencólogo y pintor. Fundador de la Tertulia Flamenca de la Isla. Escribió libros dedicados a cantaores de la Isla de San Fernando, tales como Flamencos de La Isla en el recuerdo y El Chato de La Isla entre la vida y el cante, una biografía del cantaor José Llerena.
Aunque nacido en Villanueva del Duque (Córdoba), se estableció desde la edad del servicio militar en San Fernando, donde fue tipógrafo de Marina. Narrador con premios nacionales como el finalisra en La Hucha de Oro. Fue Premio de Cuentos Puente Zuazo. Colaborador de Mirador de San Fernando y en San Fernando Información.Fundó la revista literaria Erythia (1979-1981) y una publicación de cuadernos, a modo de separatas, para poesía y narraciones.
Nacida en San Fernando. Fue miembro de la Tertulia Arillo de Letras y Artes en su primera etapa y colaboró en la revista Arena y Cal, primero en su edición de papel y después en edición digital, con artículos y poemas. Editó varios libros de poemas, tales como Ofrenda, Mi refugio, Enamorada del Amor…
María Amparo Gordillo de Celis (1933-2001)
Nacido en San Fernando. Fue maestro nacional y desde muy joven tuvo inquietudes literarias que se concretaron en la iniciativa de la Colección Dos amigos, fundada con Germán Caos R., sufragada por el ayuntamiento de San Fernando en 1964. En ella editó su relato El idolo. En Conil de la Frontera fundó la Librería y editorial La Cañaílla, que durante algunos años regentó hasta su traslado profesional a Cádiz. El que suscribe estas líneas entró en el mundo de la lectura de la poesía gracias a su generosa biblioteca, cuando Antonio, de soltero aún, vivía en la isleña cal
Francisco Carrillo Mora (1939-2023)
Nacido en San Fernando. Cartógrafo.
Empresario de Imagen y Comunicación. Ha editado Por los siglos de los siglos,
La vida que e debo y Cuando ría la
primavera, entre otras publicaciones de su profesión. Ha montado varias
obras teatrales de obras clásicas. Ha publicado multitud de artículos en varios
periódicos. Ha sido también pregonero de la Semana Santa de su tierra en 1994.
Fue académico numerario de la Academia de Ciencias, Letras y Artes de su ciudad
natal.
Florencio Collantes Pérez (1940-2014)
JOSÉ ONETO REVUELTA (1942-2019)
devenir de la vida nacional a partir de la Transición, hemos de destacar las obras siguientes: La noche de Tejero (1981), Los ultimos días de un presidente (1981) ¿A dónde va Felipe (1983)… Anatomía de un cambio de régimen (1985), entre otras.
RAIMUNDO FRANCÉS
(1942-2021)
RAIMUNDO FRANCÉS (1942-2021)
Pintor con técnica figurativa puesta al día y también autor de piezas teatrales breves todas ellas con intenciones humorísticas, que han sido representadas en varios partes del mundo y en incontables ocasiones. Editó en Publicaciones del Sur THE WALTONS - INGLES II (HOSTELERIA RESTAURACION TURISMO) (2013)
José Moreno Fraile (1969-2022)
José María Hurtado Egea (1943-2008)
José María Hurtado Egea (1943-2008)
Nacido en San Fernando. Funcionario del ayuntamiento local. Reseñista gráfico de la ciudad, a la que amó
por medio de sus investigaciones históricas. Colaboró en Mirador de San
Fernando y en Diario de Cádiz. Editó cuatro libros con fotografías
comentadas de épocas y lugares desaparecidos de la ciudad de San Fernando.
Obras publicadas: Casos, casas y plazas de San Fernando, Cosas de mi
pueblo, Efemérides ilustradas de San Fernando, La salina de San Vicente.
Gabriel
Romero Romero (1944-2006)
Nacido en San Fernando. Delineante de Bazán. Poeta colaborador en
revistas locales y autor de los siguientes libros: La música callada, La Isla y sus monumentos y Poemas
a Santa Teresa del Niño Jesús. Fue miembro de la Tertulia Río Arillo
de Letras y Artes.
Jaime Aragón Gómez (1945-2014)
Nacido en San Fernando. Doctor en Historia. Colaboró con el Ayuntamiento
isleño a la hora de la reapertura del Teatro de Las Cortes, fue un gran amante
de las artes escénicas y en concreto del teatro, donde también actuó con el
grupo de teatro Odisea, al que pertenecía.
Su labor literaria sobre la
Guerra de la
Independencia ha sido muy profusa, habiendo publicado libros
como Conil durante la ocupación francesa, Los dos tomos de La vida
cotidiana durante la Guerra
de la Independencia
en la provincia de Cádiz, editada por la Diputación Provincial,
y una larga edición de trabajos que han dado la valía de este doctor en
historia y profesor de Historia y Geografía. También ha publicado
la novela Vientos de guerra, aires de libertad.
Ignacio Bustamante Morejón (1953-2013)
Nacido en San Fernando. Funcionario del ayuntamiento. Aunque no es
escritor en el sentido que destacamos aquí, su inclusión se debe a ser autor de
pregones de semana santa que contienen un valor costumbrista muy notable. Su
pregón oficial de la semana santa de La
Isla (1987) lo consagró como un retratista de lugares y detalles
de un pintoresco valor connotativo, que le proporcionó un gran respeto entre
los cofrades más exigentes, hasta tal punto que se pidió y se llevó a
cabo su publicación. Falleció en el desgraciado accidente de tren de junio
de 2013, camino de Santiago de Compostela.
Nacido en San Fernando. Delineante de Bazán. Poeta colaborador en revistas locales y autor de los siguientes libros: La música callada, La Isla y sus monumentos y Poemas a Santa Teresa del Niño Jesús. Fue miembro de la Tertulia Río Arillo de Letras y Artes.
Nacido en San Fernando. Doctor en Historia. Colaboró con el Ayuntamiento isleño a la hora de la reapertura del Teatro de Las Cortes, fue un gran amante de las artes escénicas y en concreto del teatro, donde también actuó con el grupo de teatro Odisea, al que pertenecía.
Calle Real. Hacia la Plaza de la Iglesia
APÉNDICE DE LA MEMORIA
UN POEMA, UN POETA
Título:
COMO MANDA EL USO
Es una estancia noble, perfumada;
con ricos muebles que el imperio impuso,
los tapices de Persia y alfombrada
cual manda el dueño, como manda el uso.
Una mesa de cedro es recipiente
de una lámpara antigua de Lucena
cuya roja pantalla impertinente,
torna en color de sangre aquella escena.
A favor de la luz que reverbera,
una dama, más bella que un ensueño
con curvas incitantes de hechicera
escribe a prisa con nervioso ceño.
Tan abstraída está que no percibe
el cauteloso paso del anciano
de noble porte, pues la dama escribe
sin dar reposo a su preciosa mano.
Silencioso aquel hombre, no respira
del pecho los latidos conteniendo:
se acerca aún más, y con espanto mira
lo que aquella sirera (sic) está escribiendo.
¡Adúltera!, le dice. Ella espantada,
quiere erguirse, romper la prueba escrita;
es inútil: un arma despiadada
puso fin a la adúltera maldita.
Márchase el hombre sin que nadie intente
cortar su paso o remediar su pena;
y allá quedó la luz irreverente
dando color de sangre a una azucena.
Sangre y luz se mezclaron de tal suerte
que unidos van para fingir la glosa
de dar a un cuerpo herido por la muerte
los colores bermejos de una rosa.
Era una estancia noble del imperio
con ricos muebles que el imperio impuso,
donde quedó enterrado un adulterio
cual manda el dueño, como impone el uso.
José
Domínguez Bridoux
El doctor Juan García-Cubillana,
compañero de la Academia
de San Romualdo de San Fernando -Cádiz- y amigo, me mostró en una revista con
nombre “San Fernando Artístico”, publicada probablemente en 1923, este poema de
un autor desconocido hoy en nuestra ciudad.
Pero ¿quién
fue José Domínguez Bridoux?
Tecleamos en internet y nos encontramos la siguiente información:Victorina
Bridoux {Manchester, 1835 - Santa Cruz de Tenerife, 1862} Victorina Bridoux y
Mazzini de Domínguez nació en Manchester el 9 de abril de 1835. Hija de Carlos
Honoré Bridoux y Lefebre, de París, comerciante al por mayor, y de Angela
Mazzini, nacida en Cádiz, poetisa hermana del presbítero Antonio Mazzini y
prima segunda del general José Mazzini.A los tres años, huérfana de padre,
llega a Cádiz con su madre, que se coloca como profesora de inglés, francés e
italiano en el colegio de Religiosas Irlandesas de Gibraltar. Allí estudió
Victorina hasta los trece años, siempre con salud delicada. Luego volvió a
Cádiz, y fue junto a su madre a Sevilla y Santa Cruz.Olvidó la música y los
idiomas, en Tenerife dio funciones benéficas de declamación en el teatro de
Santa Cruz.Se casó el 15 de enero de 1855 con el capitán graduado de infantería
Gregorio Domínguez de Castro. Al fallecer a los 27 años por la fiebre amarilla
dejó un libro publicado, tres novelas sin terminar y cuatro hijos entre seis
años y ocho meses. Un dato concreto nos dice que nació en 1935 y falleció
en 1862. Su último hijo, Leopoldo nació en el mismo 1862. Aventuremos una
probable cronología al poeta comprendida entre los años 1860 y 1924, un año
después de la aparición del poema en la revista, por poner un ejemplo; pero sin
que eso sea ni siquiera aproximado, ya que no sabemos la edad que tendría en el
año de su fallecimiento. Pero es cierto que debió de escribir mucho más,
puesto que la corrección de sus versos hace suponer una evidente desenvoltura
en el quehacer poético.
Obras de Victoria Bridoux:
Lágrimas y flores. Producciones
literarias. Santa Cruz de Tenerife: Salvador Vidal, 1862. El bálsamo de las
penas. Madrid: F. Escámez, 1863. Amparo. Zaragoza: Casañal y Cª, 1890. El
secreto de la hermosura. Zaragoza: Casañal y Cª, 1890.
Hemos hallado otras fuentes, pero éstas no añaden nada a lo que
ya se ha expuesto. Deduzcamos, pues, de lo dicho que si ella falleció a los 27
años, José Domínguez Bridoux, presuntamente su hijo, debió nacer al poco tiempo
del matrimonio, o sea, a finales de los cincuenta. Casada con un militar, como
hemos visto, quizás residió en la
Isla de San Fernando; o bien pudo José, su hijo y autor del
poema, ser militar de profesión. En mis conversaciones con el poeta isleño don
Gabriel González Camoyano (1893-1967), también vinculado profesionalmente a la Marina, nunca lo mencionó,
así como sí lo hizo del poeta y médico gaditano y residente en la Isla Servando
Camúñez (1854-1936), a quien consideraba su maestro. Camúñez, como ya dije en
el artículo dedicado a él en “San Fernando Información” hace varios años, fue
un poeta de un realismo tardío de fin del siglo XIX, con todos los ingredientes
temáticos consabidos, o sea, al estilo de Zorrilla, Campoamor, Núñez de Arce,
Federico Balart, Manuel del Palacio...
El poema que nos ocupa ahora aparece
en 1923, pero pudo haber sido compuesto muchos años antes. De hecho, los poetas
que escribían entonces en La Isla
no iban, por influjo de tendencia, más allá de los poetas románticos y
realistas, sin el más mínimo asomo de la influencia imperante del Modernismo.
El estilo es de un cuño realista decimonónico, en la línea de
muchos autores de entonces, como ya hemos dicho, por ejemplo, Campoamor, que
era respetado e imitado, hasta tal punto que en su primera visita que hizo
Rubén Darío a España (1992) le dedicó una décima en la que le manifestaba su
admiración.
El poema expuesto está escrito en estrofas de serventesios.
Recuérdese que el serventesio es una estrofa compuesta de cuatro versos de arte
mayor, generalmente endecasílabos, de rima consonante y alterna (ABAB).
Aclaración: “sirera” puede contener una errata y lo real y correcto puede ser
sirena.
Quedamos a la espera de que quien pueda añadir más información, me la dé, o si
la encuentro fuera de lo que ya he procurado, ayude a completar datos sobre
este poeta desconocido en la tierra donde se le publicó este poema, que
considero notable, a pesar de que cuando se da a la luz, ya es retrospectivo,
aunque no sabemos si fue escrito muchos años antes.
DOS POETAS DESCONOCIDOS EN LA ISLA DE SAN FERNANDO
QUE VIVIERON EN ESTA CIUDAD
A UNA
BELDAD
(Becqueriana)
Volverán
los rigores del invierno
al mundo con sus sombras a enlutar,
a cubrirse otra vez de blancas nieve
las áridas montañas volverán.
Mas las horas tranquilas que a tu lado
contemplabas tu rostro con afán,
mirándose en las niñas de tus ojos,
¡esas no volverán!
Volverán a caer las mustias hojas
al impulso feroz del huracán,
volverán los espacios del relámpago
con su siniestra luz a iluminar.
Mas las noches aquellas en que el alma
Se extasiaba mirando tu beldad
y latía de amor mi amante pecho,
¡esas no volverán!
H. Amezúa Anoro
De la revista “Vida moderna”.
Septiembre 1929
Sin Título
Cual vanos edificios
que al viento desafían,
sin el menor cimiento,
sin el menor sostén;
son las obras humanos
sin providencia y guía,
sin el apoyo excelso
de la fecunda fé.
¿Qué sabe de sí mismo
el ser que Dios creó?
De rara solución;
el presente, preñado
de mil contrariedades,
y tu destino, arcano
que miras con horror.
La tierra que sus plantas
hollara confiado,
los mares poderosos
que se atrevió a surcar;
¿qué son sino misterios,
qué son sino las pruebas
que todo es un secreto
para el hombre mortal?
Hoy labras dulce nido,
que amante lo destinas
para el hogar querido
de tu feliz mujer;
y al más ligero impulso
del aquilón furioso,
ruinas, llanto y luto,
fue tu ilusión de ayer.
Si pobres y desnudos
nacemos los mortales,
y ciegos a este mundo
venimos al nacer;
si tiernos nos valemos
de próvidos cuidados,
si el llanto es nuestro verbo,
y débil nuestro pié:
Los vastos luminares
que largos derroteros
describen tan constantes
por el espacio azul;
zno son altas cuestiones
que ignoran los humanos?
¿No dicen que es muy pobre
de la ciencia la luz?
Los padres y los hijos;
la calma seductora;
los días bendecidos,
de amor y de placer;
la amistad más estrecha;
Ios caros intereses;
verás hechos pavesas,
verás desparecer.
¿A qué, loca soberbio?
¿A qué, tan necio orgullo?
¿A qué, engreída ciencia,
de abstracto galardón?
¿En dónde está la fuerza
del hombre vanidoso?
¿En dónde está el dominio
que tanto imaginó?
Si el arte consideras,
conceptos elevados,
magníficas ideas
te logra despertar;
mas ¡ay! si insano aliento
te lleva de la mano,
si buscas en el cieno
belleza natural.
Cual vanos edificios
que al viento desafían,
sin el menor cimiento,
sin el menor sostén;
son las obras humanas
sin providencia y guía,
sin el apoyo excelso
de la fecunda fe.
Mirad de nuestro cuerpo
el grande mecanismo;
buscad de la materia
la ignota formación;
la vida es un arcano,
el alma es un problema...
De tu misma existencia
ignoras tanto el giro,
que tu ayer es problema
Narciso Cayetano y Ojeda.
De la revista “IRIS”
LA VOZ
Todo era
bello en la
gentil Aurora
su frente sonrosada, blanco el
cuello,
en sus
pupilas divinal destello,
en
su rostro
la grana seductora,
en su
boca sonrisa encantadora,
brillantez o negrura en su cabello
y en su
cuerpo y andar el noble sello
y de la fina hermosura
que enamora.
Necios amantes, cual falderos
perros,
la seguian sin tregua ni descanso
o corrían, como locos por los cerros.
del remanso. ,. Mas, ¡negro
desengaño!
huyeron con platillos y cencerros,
de Aurora al escuchar la voz de ganso.
Narciso Cayetano y Ojeda.
Agosto 1914 .
con ricos muebles que el imperio impuso,
los tapices de Persia y alfombrada
cual manda el dueño, como manda el uso.
Una mesa de cedro es recipiente
de una lámpara antigua de Lucena
cuya roja pantalla impertinente,
torna en color de sangre aquella escena.
A favor de la luz que reverbera,
una dama, más bella que un ensueño
con curvas incitantes de hechicera
escribe a prisa con nervioso ceño.
Tan abstraída está que no percibe
el cauteloso paso del anciano
de noble porte, pues la dama escribe
sin dar reposo a su preciosa mano.
Silencioso aquel hombre, no respira
del pecho los latidos conteniendo:
se acerca aún más, y con espanto mira
lo que aquella sirera (sic) está escribiendo.
¡Adúltera!, le dice. Ella espantada,
quiere erguirse, romper la prueba escrita;
es inútil: un arma despiadada
puso fin a la adúltera maldita.
Márchase el hombre sin que nadie intente
cortar su paso o remediar su pena;
y allá quedó la luz irreverente
dando color de sangre a una azucena.
Sangre y luz se mezclaron de tal suerte
que unidos van para fingir la glosa
de dar a un cuerpo herido por la muerte
los colores bermejos de una rosa.
Era una estancia noble del imperio
con ricos muebles que el imperio impuso,
donde quedó enterrado un adulterio
cual manda el dueño, como impone el uso.
José Domínguez Bridoux
El doctor Juan García-Cubillana, compañero de la Academia de San Romualdo de San Fernando -Cádiz- y amigo, me mostró en una revista con nombre “San Fernando Artístico”, publicada probablemente en 1923, este poema de un autor desconocido hoy en nuestra ciudad.
Tecleamos en internet y nos encontramos la siguiente información:Victorina Bridoux {Manchester, 1835 - Santa Cruz de Tenerife, 1862} Victorina Bridoux y Mazzini de Domínguez nació en Manchester el 9 de abril de 1835. Hija de Carlos Honoré Bridoux y Lefebre, de París, comerciante al por mayor, y de Angela Mazzini, nacida en Cádiz, poetisa hermana del presbítero Antonio Mazzini y prima segunda del general José Mazzini.A los tres años, huérfana de padre, llega a Cádiz con su madre, que se coloca como profesora de inglés, francés e italiano en el colegio de Religiosas Irlandesas de Gibraltar. Allí estudió Victorina hasta los trece años, siempre con salud delicada. Luego volvió a Cádiz, y fue junto a su madre a Sevilla y Santa Cruz.Olvidó la música y los idiomas, en Tenerife dio funciones benéficas de declamación en el teatro de Santa Cruz.Se casó el 15 de enero de 1855 con el capitán graduado de infantería Gregorio Domínguez de Castro. Al fallecer a los 27 años por la fiebre amarilla dejó un libro publicado, tres novelas sin terminar y cuatro hijos entre seis años y ocho meses. Un dato concreto nos dice que nació en 1935 y falleció en 1862. Su último hijo, Leopoldo nació en el mismo 1862. Aventuremos una probable cronología al poeta comprendida entre los años 1860 y 1924, un año después de la aparición del poema en la revista, por poner un ejemplo; pero sin que eso sea ni siquiera aproximado, ya que no sabemos la edad que tendría en el año de su fallecimiento. Pero es cierto que debió de escribir mucho más, puesto que la corrección de sus versos hace suponer una evidente desenvoltura en el quehacer poético.
Hemos hallado otras fuentes, pero éstas no añaden nada a lo que ya se ha expuesto. Deduzcamos, pues, de lo dicho que si ella falleció a los 27 años, José Domínguez Bridoux, presuntamente su hijo, debió nacer al poco tiempo del matrimonio, o sea, a finales de los cincuenta. Casada con un militar, como hemos visto, quizás residió en la Isla de San Fernando; o bien pudo José, su hijo y autor del poema, ser militar de profesión. En mis conversaciones con el poeta isleño don Gabriel González Camoyano (1893-1967), también vinculado profesionalmente a la Marina, nunca lo mencionó, así como sí lo hizo del poeta y médico gaditano y residente en la Isla Servando Camúñez (1854-1936), a quien consideraba su maestro. Camúñez, como ya dije en el artículo dedicado a él en “San Fernando Información” hace varios años, fue un poeta de un realismo tardío de fin del siglo XIX, con todos los ingredientes temáticos consabidos, o sea, al estilo de Zorrilla, Campoamor, Núñez de Arce, Federico Balart, Manuel del Palacio...
El estilo es de un cuño realista decimonónico, en la línea de muchos autores de entonces, como ya hemos dicho, por ejemplo, Campoamor, que era respetado e imitado, hasta tal punto que en su primera visita que hizo Rubén Darío a España (1992) le dedicó una décima en la que le manifestaba su admiración.
El poema expuesto está escrito en estrofas de serventesios. Recuérdese que el serventesio es una estrofa compuesta de cuatro versos de arte mayor, generalmente endecasílabos, de rima consonante y alterna (ABAB). Aclaración: “sirera” puede contener una errata y lo real y correcto puede ser sirena.
Quedamos a la espera de que quien pueda añadir más información, me la dé, o si la encuentro fuera de lo que ya he procurado, ayude a completar datos sobre este poeta desconocido en la tierra donde se le publicó este poema, que considero notable, a pesar de que cuando se da a la luz, ya es retrospectivo, aunque no sabemos si fue escrito muchos años antes.
QUE VIVIERON EN ESTA CIUDAD
al mundo con sus sombras a enlutar,
a cubrirse otra vez de blancas nieve
las áridas montañas volverán.
Mas las horas tranquilas que a tu lado
contemplabas tu rostro con afán,
mirándose en las niñas de tus ojos,
¡esas no volverán!
Volverán a caer las mustias hojas
al impulso feroz del huracán,
volverán los espacios del relámpago
con su siniestra luz a iluminar.
Mas las noches aquellas en que el alma
Se extasiaba mirando tu beldad
y latía de amor mi amante pecho,
¡esas no volverán!
H. Amezúa Anoro
De la revista “Vida moderna”.
Septiembre 1929
Sin Título
Cual vanos edificios
que al viento desafían,
sin el menor cimiento,
sin el menor sostén;
son las obras humanos
sin providencia y guía,
sin el apoyo excelso
de la fecunda fé.
¿Qué sabe de sí mismo
el ser que Dios creó?
De rara solución;
el presente, preñado
de mil contrariedades,
y tu destino, arcano
que miras con horror.
La tierra que sus plantas
hollara confiado,
los mares poderosos
que se atrevió a surcar;
¿qué son sino misterios,
qué son sino las pruebas
que todo es un secreto
para el hombre mortal?
Hoy labras dulce nido,
que amante lo destinas
para el hogar querido
de tu feliz mujer;
y al más ligero impulso
del aquilón furioso,
ruinas, llanto y luto,
fue tu ilusión de ayer.
Si pobres y desnudos
nacemos los mortales,
y ciegos a este mundo
venimos al nacer;
si tiernos nos valemos
de próvidos cuidados,
si el llanto es nuestro verbo,
y débil nuestro pié:
Los vastos luminares
que largos derroteros
describen tan constantes
por el espacio azul;
zno son altas cuestiones
que ignoran los humanos?
¿No dicen que es muy pobre
de la ciencia la luz?
Los padres y los hijos;
la calma seductora;
los días bendecidos,
de amor y de placer;
la amistad más estrecha;
Ios caros intereses;
verás hechos pavesas,
verás desparecer.
¿A qué, loca soberbio?
¿A qué, tan necio orgullo?
¿A qué, engreída ciencia,
de abstracto galardón?
¿En dónde está la fuerza
del hombre vanidoso?
¿En dónde está el dominio
que tanto imaginó?
Si el arte consideras,
conceptos elevados,
magníficas ideas
te logra despertar;
mas ¡ay! si insano aliento
te lleva de la mano,
si buscas en el cieno
belleza natural.
Cual vanos edificios
que al viento desafían,
sin el menor cimiento,
sin el menor sostén;
son las obras humanas
sin providencia y guía,
sin el apoyo excelso
de la fecunda fe.
Mirad de nuestro cuerpo
el grande mecanismo;
buscad de la materia
la ignota formación;
la vida es un arcano,
el alma es un problema...
De tu misma existencia
ignoras tanto el giro,
que tu ayer es problema
Narciso Cayetano y Ojeda.
De la revista “IRIS”
LA VOZ
en su boca sonrisa encantadora,
ARTÍCULOS LITERARIOS.
ESCRITORES GADITANOS QUE CONOCÍ...
Playa de la Victoria (Cádiz)
Conocí a Adelita, Gitanilla del Carmelo, un día de julio en que el fuego del verano de 1969 se enconaba con la plaza del Mentidero de Cádiz, donde ella vivía. El sol le cogió querencia a su balcón y detrás de él, Adelita me nombraba Caballero de la Orden del Clavel, entregándome un clavel de papel muy bien confeccionado por ella misma y una estampa de la gaditana Virgen del Carmen con una dedicatoria. Sé que escribía poesías y bordaba enseres para las Vírgenes de su tierra, en especial para la Virgen del Desamparo.
Conocí a Maro Afrán en la tienda de mi madre. Maro Afrán era una especie de seudónimo de su nombre voluntariamente deformado que él utilizaba para escribir.
No sé cuáles habían sido sus circunstancias en otras épocas de su vida. A la tienda de mi madre llevaba, en un cesto grande, sobres de tisana para la venta al por menor. Era una de las maneras de buscarse la vida. Nos caíamos bien y conversábamos sobre ilusiones literarias, él sobre novelas y yo sobre poesía. Ya era un hombre que rondaba los setenta años y yo la mitad de su edad. Me dijo que iba a dar un viaje por toda España y que iría a Madrid a presentar sus novelas a un editor. Después de que mi madre cerrase la tienda, deje de verlo y no supe más de él.
José María Álvarez Galván (1923-2010)
Conocí a José María Álvarez Galván en la Tertulia Río Arillo de Letras y Artes, que se reunía en la calle San Nicolás de San Fernando, en concreto, en la Cafetería Napoleón, allá por los finales de los años 90, posiblemente en el 96 ó 97 y vino como autor invitado, seguramente, por el narrador y director de Arena y Cal Alfonso Estudillo Calderón, que era a la sazón presidente de la Tertulia. Esa tarde leyó poemas suyos, y muy especialmente sonetos, que era, por lo visto, su estrofa favorita.
José Manuel García Gómez (1930-1994)
Número de "CALETA"
Fernando Quiñones Chozas (1930-1998)
Aunque nacido en Chiclana, Fernando era tan gaditano como chiclanero, tan sencillo como simpático y ocurrente.
Número de TÁNTALO
Rafael de Cózar Sievert (1951-2014)
Conocí, antes que a él, a su madre, Concha Sievert, que frecuentaba las Tertulias de Educación y Descanso (1966-1974 ó 75). Recuerdo que era pintora y lo mismo que yo y otros tantos invitados e invitadas formábamos ese grupo de fieles concurrentes a esas Tertulias que Pepe Segura dirigía. Conchita me habló un día de su hijo Rafael, que residía en Sevilla, donde estudiaba. Supe después que Rafael estaba vinculado a la revista poética "Marejada", órgano literario del Grupo del mismo nombre (1971), que conducía en Cádiz Jesús Fernández Palacios junto con José Ramón Ripoll y posiblemente otros que no llegué a conocer.
Una tarde llegué, por fin, a conocerlo en la presentación de un libro en la Diputación de Cádiz. Entablamos una breve pero simpática conversación después de que yo le dijera que lo conocía por referencia de su madre, Concha Sievert,
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