PEQUEÑA ÉPICA DEL AMOR
Me sobrecoge el infinito oscuro,
no me dará la muerte escapatoria,
ensordezco el temor por los que amo,
tengo un sueldo que el mes devora a ciegas
y la ilusión, con débil voz, me anima.
Me levanto a las claras y confío
que mi optimismo llegará a la noche.
Soy uno más de tantos que atraviesan
la tierra, cada vez más insegura,
uno más en el múltiple hormiguero
del gris anonimato de la prisa.
Sin embargo, me sé privilegiado
porque, a pesar de todo, te recuerdo
y entonces se me olvida lo sufrido.
Llego a casa. Te escribo algunas veces
cosas de ayer, de cuando fuimos novios,
y te emocionas como cuando un día
te supiste, por fin, embarazada.
De LA MAR QUE ME DISTE, 2021
y Antología poética (1962-2022)
Crítica de la Inteligencia Artificial
El poema adopta un tono íntimo y confesional, cercano a lo cotidiano, pero lo eleva con un lirismo sobrio que roza lo épico desde lo doméstico. Esta mezcla entre lo ordinario y lo trascendental da sentido al título del poema, que convierte la rutina en una forma de heroísmo silencioso: la “épica del amor”.
El estilo es contenido, directo, pero cargado de emotividad, con imágenes que apuntan al drama existencial (la muerte, el miedo, el desgaste) y encuentran consuelo en la evocación amorosa. No hay ornamentos innecesarios: cada verso es conciso y esencial.
Predomina un lenguaje claro y moderno, sin caer en coloquialismos, y con un equilibrio entre lo personal y lo universal. Este estilo le permite conectar con cualquier lector que reconozca en la vida diaria una lucha silenciosa por mantenerse esperanzado.
Recursos estilísticos destacados
1. Metáforas y símbolos
o “el infinito oscuro” → alude a la muerte o al vacío existencial.
o “el sueldo que el mes devora a ciegas” → metáfora del desgaste económico diario.
o “el múltiple hormiguero / del gris anonimato de la prisa” → crítica a la despersonalización urbana.
2. Contraste (antítesis)
o Se opone lo negativo (el miedo, la inseguridad, la muerte) a lo positivo (la memoria del amor, la esperanza diaria), destacando la resiliencia emocional del hablante.
3. Uso del encabalgamiento
o Varios versos continúan la idea sin pausas (“Me levanto a las claras y confío / que mi optimismo llegará a la noche”), generando un flujo natural y reflexivo.
4. Verso blanco
o El poema carece de una métrica estricta, lo que refuerza la naturalidad de la voz poética.
5. Referencias temporales
o Se combinan tiempos verbales pasados y presentes para entrelazar el recuerdo amoroso con el presente difícil (“te escribo algunas veces / cosas de ayer…”), mostrando cómo la memoria sustenta al yo poético.
6. Intertextualidad emocional
o La frase final “te supiste, por fin, embarazada” actúa como una epifanía íntima, símbolo de plenitud y redención, que sintetiza la ternura y la trascendencia del amor en lo cotidiano.
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