martes, 10 de marzo de 2015

POESÍA: SURREALISMO Y FORMALISMO





G. Apollinaire





Breton publicó el Manifiesto surrealista en París en el año 1924 y se convirtió, acto seguido en el líder del grupo. El surrealismo surgió del movimiento llamado dadá, que reflejaba tanto en arte como en literatura la protesta nihilista contra todos los aspectos de la cultura occidental. Como el dadaísmo, el surrealismo enfatizaba el papel del inconsciente en la actividad creadora, pero lo utilizaba de una manera mucha más ordenada y seria.

Estos textos están tomados en parte de Internet y en parte comentados por el autor de este Blog.



Poema representativo del surrealismo poético español, entre otros.


Se querían.

Sufrían por la luz, labios azules en la madrugada,
labios saliendo de la noche dura,
labios partidos, sangre, ¿sangre dónde?
Se querían en un lecho navío, mitad noche, mitad luz.
Se querían como las flores a las espinas hondas,
a esa amorosa gema del amarillo nuevo,
cuando los rostros giran melancólicamente,
giralunas que brillan recibiendo aquel beso.
Se querían de noche, cuando los perros hondos
laten bajo la tierra y los valles se estiran
como lomos arcaicos que se sienten repasados:
caricia, seda, mano, luna que llega y toca.
Se querían de amor entre la madrugada,
entre las duras piedras cerradas de la noche,
duras como los cuerpos helados por las horas,
duras como los besos de diente a diente solo.
Se querían de día, playa que va creciendo,
ondas que por los pies acarician los muslos,
cuerpos que se levantan de la tierra y flotando…
Se querían de día, sobre el mar, bajo el cielo.
Mediodía perfecto, se querían tan íntimos,
mar altísimo y joven, intimidad extensa,
soledad de lo vivo, horizontes remotos
ligados como cuerpos en soledad cantando.
Amando. Se querían como la luna lúcida,
como ese mar redondo que se aplica a ese rostro,
dulce eclipse de agua, mejilla oscurecida,
donde los peces rojos van y vienen sin música.
Día, noche, ponientes, madrugadas, espacios,
ondas nuevas, antiguas, fugitivas, perpetuas,
mar o tierra, navío, lecho, pluma, cristal,
metal, música, labio, silencio, vegetal,
mundo, quietud, su forma. Se querían, Sabedlo.

                                          Vicente Aleixandre


 El surrealismo se caracterizó por interpretación de la realidad desde el sueño, el inconsciente, la magia y la irracionalidad Conjunción de imágenes dispares (reales o irreales), tanto en el tiempo como en el espacio.

- Los objetos y formas sin su significación tradicional (principio de la "desorientación"), el observador queda desorientado.

- Creación de imágenes equívocas de manera que una misma cosa puede ser interpretada de varias maneras (principio de la "discordancia”).


- Da importancia a lo paradójico, lo absurdo, la caducidad, la destrucción y lo misterioso.

- Además de lo onírico, representación de toda clase de simbologías, especialmente eróticas y sexuales. Todo aquello estaba en contra de la moral, la tradición y la cultura burguesa.


Parade (mayo de 1917) afirma que sus autores han conseguido:

una alianza entre la pintura y la danza, entre las artes plásticas y las miméticas, que es el heraldo de un arte más amplio aún por venir. (...) Esta nueva alianza (...) ha dado lugar, en Parade a una especie de surrealismo, que considero el punto de partida para toda una serie de manifestaciones del Espíritu Nuevo que se está haciendo sentir hoy y que sin duda atraerá a nuestras mejores mentes. Podemos esperar que provoque cambios profundos en nuestras artes y costumbres a través de la alegría universal, pues es sencillamente natural, después de todo, que éstas lleven el mismo paso que el progreso científico e industrial.


              REGISTROS POÉTICOS. 1) EL SURREALISMO

    El poema surrealista es la creación más difícil y al mismo tiempo la más fácil. Difícil porque conlleva un ejercicio literario donde se funden onirismo y automatismo sin que parezca que son fingidos. Fácil porque lleva a la tentación del disparate, del azar de asociaciones verbales a la aventura: cuanto más irracional, más atrayente.

    Si nos tenemos al primer acuñamiento de “surrealismo”, hemos de remontarnos a Apollinaire. Oigámoslo:”Un alianza entre la pintura y la danza, entre las artes plásticas y las miméticas (...) ha dado lugar (...) a una especie de surrealismo”.

   Como se ve Apollinaire habla de una fusión de las artes, como una especie de sinestesia entre dos artes. El nombre de surrealismo (de sûr y realisme, es decir, sobre la realidad) implica un espíritu nuevo que sobrevuela por encima de la tradición y los feudos académicos definitorios de los textos redichos.

  Para entender este fenómeno tal  como lo conocemos hoy hemos de avanzar hasta Bréton y su teoría, sin olvidar la aparición del dadaísmo, con su teoría nihilista de arrasar todo lo que se pensaba hasta entonces como arte. Si se anulaba la realidad y la racionalidad, había que recurrir a lo contrario, e indagar en lo irracional y su congénere el sueño. De ahí que lo onírico entre en juego como un factor decisivo, pero, ser fiel a la sueño, se ha de aceptar el automatismo de la escritura que narra lo que revela el sueño. Así, pues, el surrealismo, lejos de estar sobre la realidad, se hundía en la raíces de esa realidad cuando el poeta descendía al subconsciente y desde él enviaba al papel una fusión de elementos —imágenes y símbolos— que había que desentrañar como un mensaje poco menos que críptico por lo que tiene de revelador de lo esencial humano todavía en estado embrionario.

   Pero, tanto lo onírico como la escritura automática, se prestaban a un falseamiento del texto.

   El autor de estas líneas no va a imitar a aquellos poetas que representaron ese movimiento literario, y para huir de cualquier caída en lo disparatado y/o amanerado, pactará con la realidad, pero metamorfoseándola por medio del lenguaje, que la disloca con la ayuda de la gran estrella retórica de todas las vanguardias: la metáfora, desde el futurismo al ultraísmo.



2) EL FORMALISMO




V. Shklovski



Según Potebnia no hay arte, y en particular poesía, sin imagen. La poesía al ser un pensamiento por imágenes permite cierta economía de fuerzas mentales.
Potebnia decía que la relación entre la imagen y lo que ésta explica puede ser :
a- imagen constante para un sujeto variable
b- imagen más simple que lo que explica
Shklovski plantea que las imágenes son prácticamente invariable, que lo que se modifican son los procedimientos con los que se analizan las mismas.
El objeto puede ser:
a- percibido como poético y creado como prosaico
b- percibido como prosaico y creado como poético.
Se denominará objeto poético a aquel que ha sido creado con el fin de tener un percepción estética.
Según Shklovski, Potebnia pensaba que poesía = imagen, porque no distinguía dos tipos de imágenes, la práctica y la poética.
La ley de economía del esfuerzo puede aplicarse en la lengua sólo cuando se refiere a la lengua cotidiana. 

El automatismo genera que los objetos dejen de ser percibidos y para evitarlo es que se utiliza el proceso de singularización. Tolstoi, por ejemplo, para no caer en el automatismo lo que hacía era describir los hechos como si fueran vistos por primera vez (técnica utilizada en “Guerra y Paz” con las batallas).

En la lengua poética tanto
los componente lexicales,
la disposición de las palabras
y el carácter fónico

son elementos que se utilizan para no caer en la automatización. Según Aristóteles la lengua poética debe tener un carácter extraño y sorprendente.
 
A su vez el ritmo prosaico es un factor automatizante a diferencia del ritmo poético (el cual consiste en ritmo prosaico transgredido).
Publicado por Angie en 15:07 | Etiquetas: Shklovski, Teoría y Análisis Literario |















No hay comentarios:

Publicar un comentario